Tras el enorme escándalo de los motores diésel del Grupo VW hace unos años, parece que se ha abierto una puerta que no parece poder cerrarse. Desde entonces, ha habido innumerables investigaciones por parte de los organismos reguladores alemanes y europeos sobre todas las marcas alemanas, no sólo las del Grupo VW. Mientras que algunas investigaciones encontraron que tanto BMW como Mercedes-Benz eran inocentes de cualquier tipo de manipulación de las emisiones de diésel, las cosas no se ven bien para ellos ahora. Las tres marcas han sido acusadas recientemente por los reguladores europeos de colusión en materia de emisiones.
Según esta investigación, BMW, Mercedes-Benz y varias marcas alemanas del Grupo VW trabajaron juntas para bloquear el despliegue de la tecnología de emisiones limpias.
«Daimler, VW y BMW pueden haber infringido las normas de competencia de la UE. Como resultado, a los consumidores europeos se les puede haber negado la oportunidad de comprar coches con la mejor tecnología disponible», dijo la Comisaria Europea de Competencia, Margrethe Vestager, en una declaración reciente.
BMW no hará comentarios públicos por el momento, pero sí dijo que responderá a los investigadores. «El Grupo BMW examinará las objeciones y la información proporcionada por la Comisión Europea y presentará una respuesta a la autoridad. Dado que este asunto se refiere a procedimientos en curso de la Comisión Europea, la empresa no comentará el contenido de las objeciones en este momento. La revisión del Grupo BMW del pliego de cargos y de cualquier impacto financiero potencial resultante está en curso», declaró recientemente la marca bávara.
Los bávaros también declararon que su tecnología de emisiones difiere de la de otras marcas alemanas, diciendo que «las tecnologías de tratamiento de gases de escape utilizadas por el Grupo BMW son significativamente diferentes de otras soluciones en el mercado. El Grupo BMW ha trazado su propio camino desde el principio, utilizando una combinación de varios sistemas de control de emisiones en sus vehículos diesel. En los vehículos en los que el control de las emisiones se realiza mediante sistemas SCR, también se instala un catalizador de almacenamiento de NOx. El resultado es un excelente rendimiento de las emisiones en condiciones reales de conducción, también en comparación con los competidores. La combinación de estos dos sistemas junto con la recirculación de los gases de escape en el motor también significa que el consumo de AdBlue de los vehículos BMW es muy bajo en comparación con la competencia.»
BMW admitió que hubo una reunión entre los fabricantes de automóviles sobre cómo trabajar en torno a ciertas restricciones de emisiones, específicamente el PPF (Filtro de Partículas de Gasolina. Sin embargo, la reunión fue más bien para determinar los límites y restricciones de este nuevo PPF con los legisladores y abogados.
«El objetivo de los fabricantes y sus asociaciones era participar en el debate sobre la definición de los futuros límites técnicamente alcanzables. Se trata de una práctica habitual en todos los sectores en relación con las próximas propuestas normativas. Para lograr una posición de la industria sobre la legislación propuesta, los fabricantes se pusieron de acuerdo primero entre ellos y luego a través de las asociaciones de automóviles VDA y ACEA. Los resultados de las discusiones se incorporaron a las consultas realizadas por la Comisión», dijo BMW en su reciente declaración.
Esto no tiene buena pinta para las principales marcas alemanas, pero habrá que ver cómo se desarrolla todo para emitir un juicio definitivo.
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