BMW y otros fabricantes de automóviles se han quejado del complicado entorno económico de estos días, que está haciendo que su negocio se resienta. Washington y Pekín no se ponen de acuerdo en varios temas y las amenazas sobre los aranceles comerciales están volando estos días, causando muchos dolores de cabeza. Los bávaros han estado planeando crear un gran centro en China para la producción de coches eléctricos, pero parece que las cosas podrían tener que esperar un poco más.
Todavía no se ha tomado una decisión definitiva sobre cómo se llevará a cabo el negocio. ¿La razón? El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, amenaza con imponer un arancel del 25 por ciento a la importación de productos chinos por valor de unos 200.000 millones de dólares. Como las dos partes aún no han llegado a un acuerdo, los fabricantes de automóviles tienen que esperar y meditar un poco más si ciertas inversiones siguen teniendo sentido. Para BMW, invertir en China tendría sentido, teniendo en cuenta los menores costes de mano de obra y el apoyo que obtendría del gobierno, que está fomentando los coches de cero emisiones.
«No tenemos ninguna base para tomar una decisión en este momento. Hay que evaluar si es viable desde el punto de vista financiero y si tiene sentido», dijo el consejero delegado de BMW, Harald Krueger, a los periodistas en el Salón del Automóvil de Ginebra, sobre el tema. La compañía planea construir allí su modelo iX3, así como el MINI eléctrico, y hacer que los dos modelos se envíen a todo el mundo después. Mientras que para el MINI, la producción podría tener lugar también en Oxford, los alemanes aún no han anunciado una alternativa para el iX3.
«Esa es probablemente la cuestión más estratégica que hemos discutido en los últimos dos o tres años. Con toda la incertidumbre en torno a los aranceles. No podría darte una buena respuesta de lo que va a pasar. La única opción es ponerse en una situación en la que se pueda reaccionar», dijo Peter Schwarzenbauer, miembro del consejo de administración de BMW responsable de MINI sobre la situación en la que se encuentra la marca británica. Las cosas tampoco son fáciles para el MINI eléctrico, ya que el Brexit sigue siendo una incertidumbre en estos momentos.