El jefe de producción de BMW, Harald Krueger, dijo que la empresa no añadirá un tercer modelo a la sub-marca «i» hasta que tenga una mejor idea de la demanda.
Automotive News informa de que el desarrollo de la submarca «i» cuesta a BMW cerca de 2.700 millones de dólares, una gran apuesta para los bávaros. Pero la estrategia de alto riesgo podría dar sus frutos para BMW, que ha informado de que ya se han realizado más de 11.000 pedidos globales del vehículo eléctrico i3.
BMW dice que esto significa que los clientes deben esperar hasta seis meses por sus coches.
Aunque BMW ha registrado los nombres del i1 al i9, pero Krueger dijo que actualmente no tiene planes de añadir al i3 y al superdeportivo híbrido enchufable i8, que saldrá a la venta esta primavera.
«Tenemos que ver cómo evoluciona la demanda de los coches», dijo Krueger.
El siguiente vehículo rumoreado de BMW i es el i5. Se rumorea que el BMW i5 será más familiar, con más espacio en el habitáculo y en el maletero. Los ingenieros de BMW creen que añadiendo sólo 100 mm de espacio adicional para las piernas y otros 150 mm de voladizo trasero, pueden crear un espacioso vehículo eléctrico familiar apenas más largo que un MINI Countryman.
Crear el i5 es potencialmente una operación mucho más barata y sencilla que estirar un coche monocasco de acero convencional, ya que el i3 utiliza un chasis independiente.
En medio de los rumores de escasez de producción del i3, Krueger se negó a dar una cifra concreta del ritmo actual de producción de BMW para el i3, que se construye en Leipzig (Alemania).



