Los coches clásicos de BMW participan en el Silvretta Classic Rallye Montafon

La 20ª edición de la Silvretta Classic tuvo lugar a principios de este mes y BMW estuvo presente para mostrar algunas de sus bellezas atemporales. La rama de BMW Classic de la marca se hizo notar en los recorridos y junto a ella pudimos ver nada menos que al Príncipe Leopoldo de Baviera al volante de un clásico BMW 328 Mille Miglia Roadster, el mismo que participó en el Concurso de Elegancia de Sinaia de este año.

El Príncipe Leopoldo es, como ya sabrán, embajador de la marca BMW, pero su pasión por el famoso redondel azul y blanco se remonta a muchos años atrás, mucho antes de que se le propusiera una colaboración. Conducir el 328 fue una experiencia única, ya que es uno de los tres únicos coches de este tipo que quedan en el mundo. Aunque el coche ha sido restaurado recientemente, la tecnología a bordo sigue siendo muy antigua y hay que tener bastante cuidado cuando se está al volante, ya que cosas tan elementales como frenar pueden resultar más complicadas de lo que se pensaba.

Otro coche especial presente en la Silvretta Classic de Austria fue un BMW 507 Roadster de 1957 que fue conducido por algunos periodistas muy afortunados. Al haber sido restaurado recientemente también, era probablemente el coche más bonito del lugar, aunque estas clasificaciones puedan ser subjetivas. Sin embargo, al ver su interior rojo, tuvimos recuerdos del coche que poseía Elvis y que también fue devuelto a la vida recientemente por la misma división de BMW Classic.

Organizado por primera vez en 1998, el Silvretta Classic cumplió 20 años este año y lo celebró como es debido. Lo que diferencia a este evento de otros en todo el mundo es el hecho de que no se necesita un coche clásico propio para participar en él. Los organizadores han llegado a un acuerdo con Retro Promotion GmbH, una empresa especializada en el alquiler de coches clásicos a los aficionados para eventos como éste. Por el precio adecuado -según el tipo de coche que quieras conducir- podrás pasear por los Alpes austríacos junto a un príncipe, un BMW atemporal y un precioso roadster como el 507.

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