El Alfa Romeo Giulia Quadrifoglio Verde ha recibido algunas críticas estelares a pesar de que las ventas sólo han comenzado en el viejo continente. Sin embargo, ver un QV en la carretera, destrozando el asfalto, es una rara ocasión para el rival del BMW M3. Pero, ¿qué ocurre cuando se enfrenta a su hermano mayor, el BMW F10 M5?
Para tener una mejor idea, primero tenemos que echar un vistazo a las especificaciones. El Alfa Romeo viene con un motor V6 turboalimentado de 2,9 litros desarrollado por Ferrari que rinde 510 CV y 600 Nm (443 lb-pie) de par, cifras lo suficientemente buenas como para avergonzar a muchos otros coches. Dado su tamaño más compacto en comparación con el M5, el italiano puede acelerar hasta los 100 km/h en 3,9 segundos y alcanzar una velocidad máxima de más de 190 mph.
Sin embargo, el M5 saliente tiene un V8 biturbo de 4,4 litros que parece bastante ineficiente en comparación. Con una potencia de 560 CV y un par motor de 680 Nm, este monstruo de casi 2 toneladas es un auténtico vehículo de crucero por las autopistas. Sin embargo, puede acelerar hasta 100 km/h más despacio, incluso con su caja de cambios DCT de 7 velocidades superrápida, mientras que su velocidad máxima está limitada a 250 km/h por los controles electrónicos.
Por lo tanto, ver a estos dos en la Autobahn, persiguiéndose el uno al otro, debería ser un espectáculo entretenido para cualquier entusiasta de los coches. Por supuesto, el Alfa tiene la ventaja, gracias a su mejor relación peso/potencia, pero el M5 ha sido subestimado a menudo. Lo que hay que recordar es que mientras el Giulia está de camino a los concesionarios de todo el mundo, el BMW F10 M5 está de salida, y el nuevo probablemente vendrá con mucha más potencia y menos peso.
