El joven belga Pieter-Jan Declercq pasó sus últimas vacaciones en la hermosa Sölden, Austria. La estación de esquí cercana a Innsbruck es una de las favoritas de los aficionados al esquí en invierno y un lugar ideal para conducir coches deportivos. Pero como es un millennial, decidió renunciar a los coches deportivos con motor convencional y optó por el BMW i3 de alta tecnología.
Aunque BMW construyó el i3 como un coche para la ciudad, que pudiera circular fácilmente por el tráfico congestionado y las calles estrechas, eso no impide a sus propietarios aventurarse con su coche eléctrico, y qué mejor lugar para conducir el i3 que las curvas de las carreteras alpinas.
Uno de los mejores lugares para hacer fotos cerca de Sölden es la «Gletscherstrasse», la segunda carretera asfaltada más alta de Europa, con una altitud de 2.830 m.
La sesión de fotos que se muestra a continuación capta el i3 en toda su belleza en este magnífico entorno.
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Precio del BMW i3: 40.000 dólares