Controlar 700 CV con el eje trasero no es algo fácil de hacer y es aún más difícil si toda esa potencia está metida en un coche bastante compacto. ¿Qué pasaría si un BMW M4 tuviera que lidiar con esta potencia? ¿Podría mantener la compostura? Al final todo depende del conductor, pero la respuesta corta sería: tal vez. Como el vídeo de abajo está a punto de mostrarte, hay que tener en cuenta una gran variedad de factores antes de responder a esta pregunta.
Este M4 Coupé fue tuneado por los chicos de The Turbo Engineers, un nuevo tuneador que pretende aprovechar toda esta nueva locura de la inducción forzada que se está apoderando del mundo del tuning. Afirman que el motor de seis cilindros rectos biturbo de 3 litros del coche se ha modificado para obtener cerca de 700 CV gracias a una serie de modificaciones.

Éstas incluyen carcasas y componentes originales de BorgWarner para los turbos, holguras de mecanizado de la tapa del compresor optimizadas, canales de escape con puerto CNC y acabado a mano, supresión de descarga del silenciador modificada y optimizada por CNC, tubo de admisión con puerto CNC y acabado a mano, turbinas BorgWarner con actuadores mejorados y reforzados y un sistema de cojinetes reforzado.
Todas las piezas se instalaron en TTE, en Alemania, y se afirma que soportan fácilmente los nuevos niveles de potencia.
En la primera carrera, el M4 se enfrenta a un Dodge Challenger y fracasa completamente en el lanzamiento. La segunda carrera es contra un C7 Corvette y marca la primera victoria del coche, mientras que la última carrera es contra un Audi R8 que se beneficia enormemente de la tracción a las cuatro ruedas en este formato de carrera de resistencia.
Sin embargo, el BMW parece estar recuperando terreno a medida que aumenta la velocidad, lo que podría significar que, en una franja de asfalto más larga, el M4 podría ganarla. No obstante, mantener la tracción es el único factor que hará ganar o perder cualquier carrera de aceleración cuando se trata de este coche.


