BMW anunció ayer una inversión en una start-up destinada a agilizar los procesos de desarrollo: ELISE. A través de la rama de inversión BMW i Ventures, el Grupo BMW pasa a formar parte de la empresa, que ha estado desarrollando un software de ingeniería generativa destinado a automatizar el proceso de desarrollo de productos.
ELISE es una empresa emergente de tecnología avanzada y tiene previsto utilizar los fondos obtenidos recientemente para acelerar el desarrollo de productos y la entrada en el mercado. «ELISE permite a los ingenieros automatizar varios pasos del proceso de diseño de productos que consumen mucho tiempo», dijo Tobias Jahn, director de BMW i Ventures. «Hemos observado un gran aumento de la eficiencia durante el uso inicial en el Grupo BMW y estamos convencidos de que estos logros también son posibles a escala en el resto de la organización.»
En una fase beta exclusiva con los principales OEM y Tier1 de la industria automovilística y aeroespacial, como BMW, MAN, Ariane Group y Brose, ELISE ha validado su software durante los últimos 12 meses y ha demostrado un enorme valor añadido, ahorrando a los ingenieros hasta un 90% de tiempo en el diseño de productos. ELISE pretende cambiar radicalmente el proceso de diseño de piezas. En la actualidad, los ingenieros suelen empezar su viaje de diseño de productos en papel, imaginando el aspecto que podría tener el producto al final.
Sin embargo, los avances en la fabricación aditiva no sólo permiten muchos más grados de libertad, sino también el desarrollo de formas y estructuras totalmente nuevas.
«Tras varios años de investigación y desarrollo, hemos mostrado por primera vez nuestro software patentado a socios seleccionados y estamos abrumados por sus comentarios», afirma el cofundador Daniel Siegel.
ELISE comienza recogiendo los requisitos de las piezas, como sus casos de carga, tamaño, costes, etc., y posteriormente ayuda al diseñador a dar forma a un producto que se ajuste a los parámetros asignados.
ELISE también permite al ingeniero incluir los requisitos de otras partes interesadas, eliminando así los largos bucles de retroalimentación que estiran los plazos de desarrollo del producto. La empresa se fundó en 2018 como un spin-off del Alfred-Wegener-Institute, un reconocido centro de investigación alemán. Ha recibido el apoyo del Ministerio Federal de Economía y Energía de Alemania y del Fondo Social Europeo como parte de los programas EXIST.