Ludwig Willisch, director general de BMW de Norteamérica, dijo a la mesa redonda internacional sobre automoción de J.D. Power que uno de sus mayores retos es presionar a la sede central de la empresa en Múnich para que se vendan más vehículos.
«Nuestras plantas están a plena capacidad», dijo Willisch. «Es sólo una cuestión de quién recibe qué».
2013 fue un año récord para BMW Norteamérica con 376.790 unidades para las marcas BMW, MINI y Rolls-Royce.
El próximo lanzamiento al mercado del BMW i3 está causando a Willisch algunos dolores de cabeza también. Willisch dijo que sólo espera unas ventas de unas 2.000 unidades este año, aunque se han realizado 100.000 entregas del coche. La razón de las pequeñas cifras de ventas es la reducida capacidad de la planta del i3 en Leipzig.
Cuando se le preguntó si estaba preocupado por no conseguir suficientes i3, Willisch dijo: «Sí, en cierto modo lo estoy. Intento conseguir suficientes coches para Estados Unidos, que será el mayor mercado de i del mundo. ¿Conseguiremos suficientes coches el primer año? Probablemente no. Pero es un buen problema».
Además, el jefe estadounidense insinúa que un gran SAV se unirá a la gama de crossovers en un futuro no muy lejano.
«Obviamente, hay espacio por encima del X5. ¿Por qué no íbamos a poder cubrir ese espacio con un BMW?».
Pero Willisch añadió que es poco probable que llegue un gran crossover en un futuro próximo.
[Fuente: AutoNews]
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