Comparación del BMW X3 con el Acura RDX, el Q5, el GLC y el Volvo XC60

Se ha convertido en una especie de ritual que los fabricantes japoneses enfrenten sus últimas propuestas a sus rivales alemanes más tradicionales. El hecho de que ciertos coches sean la referencia en sus respectivos segmentos es bastante obvio cuando otros fabricantes los utilizan como los que hay que vencer. La última muestra de este tipo de comparación viene de la mano de Acura y su nuevo modelo RDX. Para celebrar el lanzamiento del coche en Estados Unidos, la compañía invitó a los periodistas a ponerlo a prueba frente a los mejores coches de su segmento, incluyendo, por supuesto, el BMW X3.

Los chicos de The Fast Lane Car aceptaron la invitación enviada por la gente de Acura para ir a probar su último RDX contra el BMW X3, el Audi Q5, el Mercedes-Benz GLC y el Volvo XC60. La elección del pelotón de pruebas no fue suya, ya que Acura eligió estos coches alemanes y suecos para compararlos con su último crossover, por considerarlos «los mejores del segmento», una afirmación con la que podemos estar de acuerdo.

Si estás suscrito desde hace tiempo, probablemente ya sepas que los chicos de The Fast Lane Car tienen un problema con la palanca de cambios de BMW y, sobre todo, con la forma de activar el Launch Control, un procedimiento que de alguna manera se les escapa cada vez que prueban un BMW. En este vídeo en particular, Roman se queja de la forma aparentemente poco intuitiva en que funciona la palanca de cambios, que te obliga a tirar de ella hacia atrás para ir hacia adelante y a empujarla hacia adelante para ir hacia atrás. Supongo que esa es la forma en que funcionan la mayoría de las transmisiones automáticas.

Hablando del BMW, también señala que para liberar el capó hay que tirar dos veces de la palanca, una característica de seguridad que BMW lleva implementando en sus coches desde hace años, y que otros fabricantes están empezando a hacer también, para proteger a los conductores. En cuanto a la comparación real entre estos cinco coches, como vas a ver, se reduce a la preferencia personal y al propósito que quieras conseguir con tu coche. ¿Quieres más lujo y confort? Elige el Q5 o el Merc. ¿Quieres ser capaz de ir fuera de la carretera? Elige el XC60. ¿Quieres divertirte al volante? Hazte con el X3 o el RDX.

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