BMW ha presentado hoy en Múnich su primer concept car del año: el BMW VISION NEXT 100. El nuevo concepto futurista ha sido diseñado para anticiparse y responder a las futuras necesidades de movilidad de las personas. En los próximos años, la movilidad será cada vez más diversa. En un futuro no muy lejano, la mayoría de los vehículos se conducirán completamente solos: las personas se desplazarán con robots sobre ruedas.
La VISION NEXT 100 viene a mostrar cómo sería ese mundo.
Al desarrollar el BMW VISION NEXT 100, el objetivo principal era crear no un vehículo anónimo, sino uno altamente personalizado y totalmente orientado a satisfacer todas las necesidades del conductor.
Para el BMW VISION NEXT 100, el equipo de diseño tuvo en cuenta específicamente todas las tendencias y desarrollos tecnológicos que serán más relevantes para BMW en las próximas décadas. Sin embargo, también tomaron muchas referencias de innovaciones y diseños del pasado.
Adrian van Hooydonk, Director de Diseño de BMW Group: «Si, como diseñador, eres capaz de imaginar algo, hay muchas posibilidades de que algún día se haga realidad. Así que nuestro objetivo con la BMW VISION NEXT 100 era desarrollar un escenario futuro con el que la gente se comprometiera. La tecnología va a avanzar de forma significativa, abriendo nuevas y fantásticas posibilidades que nos permitirán ofrecer al conductor aún más asistencia para una experiencia de conducción aún más intensa.
«Mi opinión personal es que la tecnología debe ser lo más intuitiva posible para su manejo y experiencia, de modo que las futuras interacciones entre el ser humano, la máquina y el entorno sean perfectas. La BMW VISION NEXT 100 muestra cómo pretendemos dar forma a este futuro».
De conductor a conductor definitivo – a través de la inteligencia digital.
En el futuro, los conductores de BMW seguirán queriendo pasar la mayor parte del tiempo que están en su coche al volante. En el BMW VISION NEXT 100, el conductor seguirá siendo el centro de atención, con una conectividad constante, inteligencia digital y tecnologías de última generación a su disposición. Pero eso no es todo: el BMW VISION NEXT 100 convertirá al conductor en el Ultimate Driver.
Al diseñar el BMW VISION NEXT 100, el punto de partida fue el interior. En los años venideros, el bienestar del conductor será cada vez más importante, y en lugar de limitarse a sentir que está en una máquina que se conduce sola, debe sentir que está sentado en una que ha sido diseñada específicamente para él. Esta idea dio lugar a una arquitectura en la que la cabina parece especialmente espaciosa en comparación con el tamaño total del vehículo, al tiempo que conserva las líneas exteriores típicas de un BMW.
El diseño del interior permite varios modos de funcionamiento: El modo Boost, en el que el conductor está a los mandos, y el modo Ease, en el que el conductor puede sentarse y dejar que el vehículo se haga cargo. En el modo Ease, el vehículo se convierte en un lugar de retiro con mucho espacio, una iluminación agradable y un ambiente confortable. En el modo Boost, el conductor toma el mando y se beneficia de la ayuda sutil e intuitiva que ofrece el vehículo. En todo momento, el vehículo aprende cada vez más sobre la persona al volante, gracias a su inteligencia sensorial y digital, que el Grupo BMW denomina Companion. El Companion aprende progresivamente a ofrecer el tipo de apoyo adecuado para transformar al conductor en el Ultimate Driver.
Un elemento muy importante del Vision Vehicle es otra innovación conocida como Alive Geometry, cuyo aspecto nunca antes se había visto en un coche. Consiste en una especie de escultura tridimensional que funciona tanto dentro como fuera del vehículo.
Alive Geometry permite la interacción entre el conductor y el vehículo.
Alive Geometry se compone de casi 800 triángulos móviles que se han colocado en el panel de instrumentos y en algunas zonas de los paneles laterales. Funcionan en tres dimensiones y se comunican muy directamente con el conductor a través de sus movimientos, que se parecen más a gestos que a representaciones bidimensionales en una pantalla. Incluso el más mínimo movimiento periférico es perceptible para el conductor. En combinación con el Head-Up Display, Alive Geometry fusiona de forma única lo analógico con lo digital.
Los triángulos funcionan de forma muy parecida a una bandada de pájaros en vuelo controlado, y sus movimientos coordinados actúan como señales que son fácilmente comprensibles para quienes están dentro del coche. Combinados con el Head-Up display, hacen participar al conductor en una forma de comunicación precoz, en la que una señal intuitiva predice un acontecimiento inminente en tiempo real.
Hoy en día ya se pueden ver varios enfoques que parecen confirmar la viabilidad de esta solución. La creación de prototipos y la fabricación rápida, por ejemplo, ganan cada vez más importancia y es probable que sean habituales dentro de 30 años. Aunque en la actualidad sigue siendo difícil imaginar cómo podrían coordinarse cientos de diminutos triángulos para que funcione la Geometría Viva, en los próximos años será posible, a medida que se sustituyan los métodos actuales de fabricación de vehículos. En el futuro será posible producir formas mucho más complejas y flexibles. Por eso, en el marco de la BMW VISION NEXT 100, el Grupo BMW habla de la impresión 4D, un proceso que añade un cuarto nivel a los componentes: el funcional. En los próximos años, las piezas impresas fabricadas de este modo integrarán directamente funciones que hoy tienen que diseñarse y producirse por separado antes de incorporarse al conjunto.
Por el momento, el mundo digital está fuertemente vinculado a las pantallas; el siguiente paso serán los LED orgánicos, es decir, las pantallas que pueden cambiar de forma libremente. Sin embargo, el Vision Vehicle sugiere que en algún momento no habrá más pantallas. En su lugar, todo el parabrisas servirá de pantalla gigante, directamente delante del conductor. En el futuro, los mundos digital y físico se fusionarán considerablemente, como también se expresa en Alive Geometry, por ejemplo, en la forma en que el salpicadero analógico interactúa con el Head-Up Display digital en el parabrisas delantero.
Modos de conducción Boost y Ease para operaciones controladas por el conductor o el vehículo.
Tanto en el modo Boost como en el Ease, los elementos y tecnologías del vehículo permiten disfrutar de una experiencia de conducción más intensa o más relajada, en función de lo que se necesite. La transición entre modos es impresionante y está perfectamente orquestada, y Alive Geometry sigue siendo relevante en todo momento. En el modo Boost, cuando el conductor se concentra totalmente en la carretera, Alive Geometry destaca la línea de conducción ideal o el posible punto de giro y advierte de los vehículos que se aproximan. Más que hacer que el conductor conduzca más rápido, este tipo de ayuda se propone hacer que conduzca notablemente mejor. Además, el feedback intuitivo tiene un impacto más físico e inmediato que una voz robótica o las instrucciones en una pantalla. En cambio, en el modo Ease, Alive Geometry es más discreto en sus movimientos, informando a los ocupantes sobre la carretera que tienen por delante y sobre las maniobras de aceleración y frenado que están a punto de producirse.
En el modo Boost, todo el vehículo se centra en el conductor, ofreciéndole una ayuda inteligente para maximizar la experiencia de conducción. El asiento y el volante cambian de posición, y la consola central se desplaza para orientarse más hacia el conductor. A medida que avanza el viaje, el conductor puede interactuar con el vehículo mediante el control de gestos.
El BMW Head-Up Display analógico de contacto del futuro utiliza todo el parabrisas para comunicarse con el conductor. En el modo Boost, se centra exclusivamente en lo que realmente importa al conductor: información como la línea ideal, el punto de giro y la velocidad. Además, la conectividad total, los sensores inteligentes y el intercambio permanente de datos permiten que el Head-Up Display genere una imagen digital del entorno del vehículo. En condiciones de niebla, por ejemplo, esto significa que el conductor puede beneficiarse de información como los vehículos que cruzan por delante, antes de que estén a la vista. Además, al aprender cada vez más sobre el conductor, el sistema mejora continuamente, concentrándose en crear en todo momento la experiencia de conducción más intensa y personal posible.
La transición al modo Ease conlleva un cambio completo del ambiente interior. El volante y la consola central se retraen y los reposacabezas se desplazan hacia un lado para crear un ambiente relajado y acogedor. Los asientos y los paneles de las puertas se fusionan para formar una sola unidad, lo que permite al conductor y a los pasajeros sentarse en un ligero ángulo. Esto facilita que se enfrenten y se sienten en una posición más relajada para facilitar la comunicación. Mientras tanto, el Head-Up Display ofrece a los ocupantes contenidos personalizados junto con la información y el entretenimiento que desean.
Dependiendo del modo de conducción, el enfoque del vehículo cambia, concentrándose en lo esencial para el conductor en el modo Boost, y en el entorno y la atmósfera en el modo Ease, destacando los impresionantes paisajes o edificios de interés por los que pasa el coche, por ejemplo.
Si el vehículo está en modo Boost o Ease también es claramente evidente para los demás usuarios de la carretera, ya que la parrilla de riñón característica, los faros dobles y las luces traseras en forma de L actúan como herramienta de comunicación. Sus diferentes colores de luz indican en qué modo se encuentra el vehículo.
Compañero: El compañero digital inteligente conecta al conductor y al coche.
El Companion está simbolizado por un pequeño elemento escultórico que representa la conexión conductor-vehículo. Con la forma de una gran piedra preciosa tallada, está situado en el centro del salpicadero, justo debajo del parabrisas, donde simboliza la inteligencia, la conectividad y la disponibilidad del BMW VISION NEXT 100. También representa el intercambio constante de datos: cuanto más aprende sobre el propietario y sus hábitos de movilidad, más inteligente se vuelve. En algún momento conoce al conductor lo suficientemente bien como para realizar automáticamente las tareas rutinarias por él y ofrecerle los consejos adecuados cuando los necesite. Independientemente del vehículo en sí, el aprendizaje constante hace que el Companion sea cada vez más valioso para su propietario.
El Companion también desempeña un papel importante en la comunicación entre el conductor y el vehículo cuando el coche pasa del modo Boost al Ease. Mientras el conductor se concentra en la carretera en el modo Boost, el Companion permanece en el salpicadero. Pero cuando el BMW VISION NEXT 100 toma el control en el modo Ease, se eleva para crear una interfaz con el parabrisas. Una señal luminosa indica al conductor que el coche está preparado para la conducción totalmente autónoma. Para los demás usuarios de la carretera, el Companion tiene una función similar, señalando mediante su propia luz y la del vehículo que el coche está funcionando en modo automatizado. En determinadas situaciones de tráfico, el Companion está en contacto visual con otros usuarios de la vía pública, ayudando a los peatones a cruzar la carretera mediante la gradación de luz verde en la parte delantera del vehículo.
Exterior de la marca BMW.
El diseño del BMW Vision Vehicle se caracteriza por una mezcla de deportividad de tipo coupé y la elegancia dinámica de una berlina. Con 4,90 metros de longitud y 1,37 metros de altura, tiene unas dimensiones exteriores compactas. Sin embargo, en su interior tiene las dimensiones de una berlina de lujo de BMW.
Las grandes ruedas están situadas en los bordes exteriores de la carrocería, lo que confiere al vehículo la postura dinámica que caracteriza a BMW. En cuanto a la aerodinámica, la geometría exterior Alive Geometry contribuye a un efecto extraordinario: cuando las ruedas giran al dirigir el vehículo, la carrocería las mantiene cubiertas como si fuera una piel flexible, acomodándose a sus distintas posiciones. El innovador diseño del BMW VISION NEXT 100 le confiere un coeficiente de resistencia aerodinámica extremadamente bajo, de 0,18.
El exterior del vehículo es de color cobrizo, diseñado para subrayar la idea de que los vehículos BMW del futuro deben parecer técnicos y, sin embargo, tener una calidez, simbolizada por los estrechos vínculos entre el vehículo y su conductor.
Esta relación comienza en cuanto el conductor se acerca al vehículo: las tecnologías de sensores inteligentes abren automáticamente sus puertas laterales. Para que el conductor tenga más espacio para entrar y salir, el volante está a ras del salpicadero. Una vez sentado, toda la gama de sistemas se activa tocando el logotipo de BMW en el centro del salpicadero. La puerta se cierra, el volante se adelanta y comienza la experiencia de conducción.
Materiales del futuro.
Los diseñadores del BMW VISION NEXT 100 utilizaron principalmente tejidos fabricados con materiales reciclados o renovables. Los componentes de carbono visibles y no visibles, como los paneles laterales, se fabrican con residuos de la producción normal de fibra de carbono. En el futuro, la elección de los materiales será aún más importante en todo el proceso de diseño y producción.
Con el tiempo, también se añadirán otros materiales nuevos a la mezcla, lo que permitirá que surjan diferentes formas de vehículos. Para ahorrar recursos y apoyar una fabricación más sostenible, se utilizará menos la madera y el cuero, mientras que los materiales innovadores y las consiguientes nuevas posibilidades de diseño y producción pasarán gradualmente a primer plano. Este enfoque ya se ejemplifica con el uso de textiles de alta calidad y monomateriales fácilmente reciclables y la eliminación del cuero en el interior del BMW VISION NEXT 100
