Una de las cosas más divertidas del mundo del automóvil es cuando los fabricantes de automóviles deciden fabricar un coche único tan ilógico y loco que el mundo entero se detiene en el asombro y el desconcierto. En el pasado ha habido varios de estos coches de diferentes fabricantes, y BMW ha tenido su parte justa. Hace poco, hablamos del psicótico M8 Supercar con motor V12 que BMW construyó como experimento, pero decidió desechar el proyecto. Este tipo de coches son los que permiten a los fabricantes de automóviles mostrar sus proverbiales músculos y mostrar al mundo lo que pueden hacer.
A veces, sin embargo, es sólo por diversión, para celebrar. En 2000, tras la victoria de BMW en Le Mans en 1999, BMW decidió celebrarlo creando un monstruo: el BMW X5 Le Mans.
BMW cogió el V12 de su piloto ganador de Le Mans y lo metió con calzador en el más improbable de los coches, un X5. Este X5 con motor V12 se equipó con una transmisión manual de 6 velocidades, asientos y arneses de competición Sabelt, se desmontó por completo y se le dio una protuberancia en el capó muy chula, llantas de 20″ y una suspensión rebajada.
Esto convirtió al típico SUV familiar, algo que suele estar más a gusto en un aparcamiento de Pottery Barn que en un circuito de carreras, y lo convirtió en un monstruo V12 que escupe fuego.
El X5 V12 Le Mans tenía 700 CV, era capaz de pasar de 0 a 100 km/h en 4,7 segundos y tenía una velocidad máxima limitada electrónicamente de 193 km/h. En un X5. Eso es una locura. Pero espera, hay más. Hans Stuck, el famoso piloto de carreras de BMW, llevó el X5 Le Mans a Nurburgring (porque son alemanes, deben ir al ‘ring’) y fue capaz de dar una vuelta en 7 minutos y 50 segundos. Fue capaz de superar la marca de los 8 minutos en Nurburgring Nordschleife con un X5. Ese tiempo sería rápido para los estándares actuales, pero eso fue hace 15 años. Simplemente una locura.
El X5 Le Mans es una prueba más de que BMW miente cuando dice que gente como Adrian Van Hooydonk está a cargo del diseño, en realidad es el Dr. Frankenstein. Debe serlo, ya que BMW es capaz de hacer los vehículos únicos más locos del mundo, vehículos que a nadie se le ocurriría crear. Y BMW lo hace, simplemente, por el gusto de hacerlo, para ver si puede. Así que ahora sabes que al menos un monstruo es real, el BMW X5 Le Mans.
Aquí hay un vídeo de Hans Stuck conduciendo dicho X5. Escucha el aullido de ese V12 de carreras y tu fin de semana del Memorial Day será mucho mejor.
P.D. Está en alemán, pero sigue siendo entretenido si no hablas alemán.