BMW USA ha anunciado hoy que la planta de Spartanburg, en Carolina del Sur, está realizando los últimos preparativos para iniciar la producción de la última iteración del BMW X5. La planta de Spartanburg es la más grande que el Grupo BMW tiene en todo el mundo, habiendo recibido inversiones de más de 400 millones de dólares en los últimos años, para ampliar la capacidad de producción a más de 450.000 unidades al año, superando al anterior rey de la producción de los bávaros, la planta de Dingolfing.
La planta de Spartanburg se puso en marcha hace más de 20 años y no ha dejado de crecer con el tiempo, siendo hoy el único lugar donde se fabrican todos los SUV X de BMW basados en la plataforma CLAR. Esto significa que sólo los crossovers X1 y X2 no se construyen aquí, ya que utilizan la plataforma UKL y necesitan líneas de montaje diferentes. A partir de este verano, la planta de Carolina del Sur también se encargará de la fabricación del BMW X5, la cuarta generación que escribirá una nueva página en los libros de historia del SAV (Sports Activity Vehicle) original. Esto demuestra el importante papel que desempeña la planta de fabricación no sólo en la organización del Grupo BMW, sino también a nivel local, en la economía estadounidense, cosas que podrían cambiar si la guerra comercial de la que todo el mundo habla hoy se convierte en algo real.
Desde su lanzamiento, el BMW X5 se vendió en más de 2,2 millones de unidades en todo el mundo. En EE.UU., por ejemplo, fue considerado uno de los tres modelos más vendidos de BMW cada año desde 2001, lo que demuestra el apetito de los clientes estadounidenses por los SUV de alta gama. El modelo G05 será el décimo SUV X que se fabrica en Spartanburg desde que empezó a fabricar coches en 1994. El éxito que los modelos X han registrado en todo el mundo ha convertido a la planta de BMW en Spartanburg en el mayor exportador de automóviles por valor en los Estados Unidos. Además, las compras de BMW en Estados Unidos de piezas y materiales para la producción en la planta de Spartanburg ascendieron a casi 6.000 millones de dólares (USD) en 2017 a más de 300 empresas proveedoras estadounidenses.
Desde la introducción del BMW X5 original, dos de cada tres vehículos producidos fueron exportados para su venta a clientes fuera de los Estados Unidos. Si se consideran los X3, X4, X5 y X6 fabricados en Spartanburg en conjunto, más del 70% de la producción anual se envía a los mercados de exportación. Todo ello ha venido acompañado de un gran aumento de la plantilla, ya que la planta ha pasado de tener sólo 500 empleados en 1994 a más de 10.000 en la actualidad, y se espera que algunos más se incorporen al equipo en 2021. Pero eso no es todo, ya que un estudio realizado por la Universidad de Carolina del Sur reveló que por cada 10 puestos de trabajo en las instalaciones de BMW se crean otros 90 empleos auxiliares en los campos adyacentes.