El BMW M8 Competition es el coche más rápido y potente que ha fabricado BMW. Estos últimos elogios los comparte con otros modelos, pero aun así, el M8 tiene ciertos trucos bajo la manga que lo hacen un poco mejor. Esto se confirmó, una vez más, cuando los chicos de Sport Auto en Alemania llevaron el coche a dar una vuelta en caliente alrededor de Nurburgring. Volvieron con un tiempo de vuelta de 7:32,79 que es más de 3 segundos más rápido que un M5 Competition.
Como todos sabemos, 3 segundos es una diferencia bastante grande en la pista. Algunos dirán que el tiempo obtenido por el M5 es decepcionante, pero yo estoy aquí para recordarles que la berlina viene con cuatro asientos totalmente funcionales, y puede acomodar a adultos en su interior. También está el hecho de que el M8 es un poco más ligero. No obstante, este tiempo de vuelta sitúa al M8 Competition en una compañía realmente interesante.
Con 7:32,79, el BMW M8 Competition es sólo 0,79 segundos más lento que un Audi R8 V10 Plus y un Porsche 911 GT3 (991) en Nurburgring. Se trata de coches muy rápidos, ambos considerados supercoches en la industria. El M8 Competition también es más rápido que: Porsche 911 Turbo S (911), Mercedes-AMG GT S, McLaren 650S Spider o el Honda NSX. Y, para hacer las cosas aún más interesantes, el M8 estaba corriendo con neumáticos Pirelli P Zero.
Lo hemos visto mucho últimamente y muchos nos preguntamos cuánto más rápido podría ser el coche con unos neumáticos mejores, como los Michelin Pilot Sports 4S o incluso los Cup 2. Supongo que nunca lo sabremos, ya que la mayoría de las pruebas se realizan con lo que el coche lleva de serie, que son neumáticos Pirelli. No obstante, el M8 Competition demostró que no sólo es rápido, sino que es digno del título de supercoche una y otra vez, independientemente de los neumáticos que lleve.
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