Ahora que el nuevo Rolls-Royce Ghost por fin ha salido a la luz, podemos echar un vistazo más de cerca al proceso de ingeniería que hay detrás de este coche de lujo. El nuevo coche viene con tantas novedades que es difícil mantenerse al día. El caso es que se trata del Rolls-Royce más avanzado jamás fabricado. Esta vez, el Ghost no se centra sólo en el confort, sino que es evidente que también se ha tenido en cuenta el placer de conducir.
Es la primera vez que la compañía británica hace algo así, por lo que tenemos mucha curiosidad por ver cómo se desarrollan sus esfuerzos en el mundo real. El siguiente vídeo incluye una entrevista con Jonathan Simms, el jefe de ingeniería que estuvo a cargo del proceso de desarrollo. Según él, las instrucciones que se dieron al equipo fueron bastante sencillas: hacer un coche que fuera bueno en todo. Básicamente, no sólo tenían que crear un Rolls cómodo, sino también uno dinámico.
Resulta que la arquitectura spaceframe que Rolls-Royce ha desarrollado para sus coches, también conocida como la «Arquitectura del Lujo», resultó ser providencial, ya que permite un gran margen de maniobra a los ingenieros cuando se proponen un objetivo concreto. Al parecer, la nueva suspensión delantera se estableció para eliminar la mayor cantidad de energía transferida de la carretera, con el fin de mantener a todo el mundo en el interior lo más cómodo posible. Si hemos de creer a Jonathan, esto se sentiría realmente como volar.
Entonces, la parte dinámica de la prueba salió a relucir. Según una encuesta realizada por Rolls-Royce entre los propietarios del Ghost, la mayoría quiere pasar más tiempo al volante y disfrutar más de sus coches. Por eso el nuevo Ghost viene con tracción y dirección a las cuatro ruedas, ambas una primicia para el modelo. Dejaré que Johnathan nos explique el resto, en el siguiente vídeo.
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