A principios de junio, la planta de BMW en Spartanburg, Carolina del Sur, celebró su coche número cinco millones fabricado en suelo estadounidense. El momento fue capturado en el tiempo en las instalaciones y ahora echamos un vistazo al modelo de celebración: un BMW X5 M Competition rojo Toronto.
El proceso de producción en el mundo del automóvil actual ha sufrido tal transformación desde la primera cadena de montaje creada por Henry Ford que todo este vídeo parece gente jugando con legos de tamaño natural. Todo se ensambla con precisión, todo encaja en su sitio, no se pierde tiempo y no hay que cometer errores.

De parte del proceso se encargan los robots. Cada vez desempeñan un papel más importante, ya que la tecnología que los sustenta está evolucionando. También son menos propensos a fallar o a cometer errores, pero incluso su trabajo se comprueba mediante IA y escáneres 3D.
La tecnología de Industria 4.0 de BMW también utiliza robots autónomos en ciertas plantas de todo el mundo, que pueden suministrar a los trabajadores lo que necesitan o ayudar en otras tareas repetitivas.
En definitiva, la planta de Spartanburg es una de las más grandes que tiene BMW en el mundo. Con una capacidad de más de 450.000 unidades al año, el emplazamiento estadounidense se encarga de fabricar todos los SUV de la marca BMW, construidos sobre la arquitectura CLAR. Eso va desde el X3 hasta el X7.
Dado que el mundo está empeñado en comprar SUV en estos días, se puede imaginar la cantidad de trabajo que hay que hacer aquí. No es de extrañar, pues, que el quinto millón de BMW fabricado aquí haya llegado tan rápido.
Por los próximos cinco millones. Ahora veamos cómo se fabrica un BMW X5 M.
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